A Opinión del 30/12/24
Aguascalientes enfrenta un panorama prometedor con inversión extranjera récord, pero depende de diversificar su economía para garantizar sostenibilidad.
Aguascalientes: Un oasis de inversión Vs. 2025
En el cierre de 2024, Aguascalientes se ha erigido como una de las joyas de la inversión en México. Con una captación de 326 millones de dólares en inversión extranjera directa (IED) durante el tercer trimestre, el estado reafirma su lugar entre los tres principales receptores de capital extranjero en el país. Este flujo, proveniente de países como Alemania, Japón, Estados Unidos y Reino Unido, refleja un dinamismo que muchos califican como un “oasis de inversión”. Sin embargo, ¿es sostenible este auge?
La gobernadora Teresa Jiménez ha destacado en diversas oportunidades la creación de oportunidades laborales y crecimiento profesional como el gran beneficio de esta bonanza económica. Aun así, tras un análisis más profundo, surgen preguntas sobre los desafíos a largo plazo. En 2025 es trascendental que no se baje la guardia y se enfoquen grandes esfuerzos en la atracción de inversión extranjera en Aguascalientes como referencia de desarrollo de la región centro del país.
La estructura de la inversión en el estado se concentra en la industria manufacturera, especialmente en la fabricación de equipos de transporte y autopartes, además de sectores como el suministro de energía y los servicios técnicos. Es un modelo híbrido que combina eficiencia productiva y plataforma de exportación, similar al caso de Nissan, cuyo 67% de producción en México se destina a mercados extranjeros. Sin embargo, esta dependencia de industrias específicas puede ser también una vulnerabilidad.
La amenaza del contexto internacional
El panorama para 2025 plantea incertidumbres significativas, especialmente con la inminente administración de Donald Trump en Estados Unidos. Si bien hasta ahora los tratados comerciales, como el T-MEC, han sido un pilar para la atracción de inversiones, la posible renegociación de estos acuerdos podría alterar drásticamente el flujo de capital hacia México. Aguascalientes, al depender en gran medida de exportaciones y capital extranjero, podría enfrentar riesgos si las reglas del juego cambian.
El caso de Estados Unidos no es menor. Empresas mexicanas como Liverpool, Cemex, FEMSA y Arca Continental han realizado inversiones estratégicas en ese país durante 2024, fortaleciendo su presencia a pesar de las tensiones políticas. Estas adquisiciones destacan una tendencia dual: mientras capital extranjero busca oportunidades en México, las empresas mexicanas miran al norte como una plataforma de crecimiento.
¿Hacia dónde va Aguascalientes?
El estado ha logrado atraer más de 2,135 millones de dólares en IED durante la administración actual, consolidándose como un actor clave en el mapa económico nacional. Sin embargo, la dependencia de sectores industriales específicos plantea la pregunta: ¿qué tan diversificada está la economía de Aguascalientes para resistir cambios externos?
Además, en un mundo donde las decisiones políticas y comerciales tienen un peso crucial, la sostenibilidad de este oasis depende no solo de mantener tratados internacionales vigentes, sino también de adaptarse a las nuevas tendencias económicas.
Una reflexión final
Mientras Aguascalientes celebra un año de récords, la pregunta sobre su futuro resuena con fuerza. ¿Podrá este estado seguir siendo un imán de inversión en un entorno tan cambiante? La respuesta dependerá de su capacidad para adaptarse, innovar y diversificar su economía. Por ahora, los números son favorables, pero el verdadero desafío radica en convertir este momento de auge en un modelo sostenible desde la privilegiada trinchera de su región geográfica.
Al tiempo… y a su opinión.
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