VIVIR DE LA BASURA PARA VIVIR COMO REY
Juan Francisco de 70 años de edad ha dedicado su vida a Pepenar en los contenedores de basura y en el relleno Sanitario de San Nicolás. Nunca se imaginaba que ese medio de vida lo llevaría a vivir en una residencia. Todo empezó en un día como cualquier otro lleno de miedos, incertidumbre y desconfianza por infectarse de un virus cintagioso. Pero se armó de valor y empezó a revisar cada uno de los contenedores del Barrio de la Purisima l. Ya llevaba casi dos horas y solo había encontrado botes de PET reciclables y algunos cartones. Y cuando todo parecía ser un día rutinario donde sus ingresos eran de 50 pesos en un día encontró un cofre lleno de tierra. A simple vista parecía una caja vieja de cobre pintada de color marrón. Francisco decidió llevársela a irse a casa. Ya con ella estaba contento de llevarla y limpiarla para venderla a un comerciante de un tianguis. “Si llegué y la puse en el patio de mi casa atrás porque nunca me imaginé lo que sería. Y luego de cuatro días la lavé y vi que la pintura se le caía y cuál fue mi sorpresa que empezó a cambiar a amarilla. Y no le di importancia. Y tal parece que era un tesoro”. Si así fue un cofre de oro, bañado en oro puro que bien pudo ser adquirida por un coleccionista de joyas que si bien parecía que había sido traída de Egipto. Francisco la llevó a valuar al Monte de Piedad y le ofrecieron una cantidad considerable que desconfiaron que se la había robado. Pero no se rindió y fue a pedir otra opinión a otra joyería que finalmente ya no volveria a trabajar jamás. “Si me ofrecieron millones de pesos y yo convencido de esa oportunidad accedí. Y a partir de ahí mi vida cambió de vivir de la basura y habitar una casa en renta adquirí una casa en un lugar residencial que por seguridad me reservo revelar más datos”. Claro finalmente Francisco es una muestra que ser Pepenador puede ser el camino fácil para llegar a vivir dignamente.