A Opinión del 20/5/25
La participación ciudadana fortalece la democracia; abstenerse debilita. Es vital votar y vigilar el actuar del Poder Judicial.
Democracia y Poder Judicial: una invitación a participar y vigilar
En una democracia, la participación ciudadana no se limita al acto de votar. Se construye y se fortalece día a día, con acciones informadas, responsables y conscientes. En ese sentido, los foros informativos “¡Conóceles!”, organizados por el Instituto Nacional Electoral (INE) en Aguascalientes, representan una oportunidad inédita: por primera vez, quienes aspiran a ocupar cargos en el Poder Judicial de la Federación —magistraturas de circuito y juzgados de distrito— se presentan ante la ciudadanía para exponer sus propuestas e ideas.
Tuve el honor de ser moderador de estos foros, que se llevan a cabo del 20 al 26 de mayo. A través de ellos, el INE busca acercar a la ciudadanía con quienes podrían desempeñar funciones clave dentro del sistema de justicia, en un proceso electoral extraordinario que marca un antes y un después en la relación entre el Poder Judicial y la sociedad. Este ejercicio contribuye a visibilizar una parte del Estado que históricamente ha permanecido distante, y cuya labor, sin embargo, afecta de forma directa los derechos y la vida cotidiana de las personas.
En este contexto, resulta preocupante que algunos sectores promuevan el llamado a no participar en esta elección. La abstención no fortalece la democracia; por el contrario, debilita la voz colectiva y entrega las decisiones a una minoría. La elección se llevará a cabo con o sin nuestra participación, y no ejercer el derecho al voto es, en los hechos, renunciar a incidir en el rumbo que tomará una de las instituciones más relevantes del país.
Más allá del voto, el verdadero reto será mantener una ciudadanía vigilante. Quienes resulten electos deberán saber que su labor será observada con atención. Es momento de asumir que el Poder Judicial no es un ente lejano ni intocable. Sus resoluciones impactan la legalidad, los derechos humanos, el combate a la corrupción y el equilibrio de poderes. Por ello, como sociedad, debemos exigir independencia, transparencia y rendición de cuentas.
También es relevante destacar que este proceso contempla acciones afirmativas importantes, como el simulacro de votación para personas con discapacidad, lo que refuerza el compromiso institucional con la inclusión y la accesibilidad.
La democracia se defiende con participación. No votar es dejar que otros decidan por nosotros, pero también es una forma de desentendernos de un deber cívico que hoy más que nunca exige compromiso. La justicia es un pilar fundamental del Estado de derecho y debe ser un tema de interés colectivo. Involucrarse, informarse y participar son los primeros pasos para una ciudadanía activa y una democracia más sólida.
El reto está en nuestras manos: que la elección judicial no pase desapercibida y que, gane quien gane, la sociedad siga ahí, observando, exigiendo y construyendo.
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